En mi caso, el 31 de diciembre de 2016 dejará de funcionar la aplicación Whatsapp en mi querido Blackberry 9320. Ya no podía utilizar mis redes sociales, pero no me importaba mucho, ya que estoy con mis laptops todo el día de acá para allá, y puedo acceder a ellas en cualquier momento. Y prefería durante los viajes de un lugar a otro leer un libro a revisar compulsivamente mi muro de facebook, el timeline de twitter, instagram, etc, etc.
Los otros casos son relacionados a computadoras de escritorio y notebooks. Algunas de ellas con un estado impecable a nivel estético, pero a nivel de hardware y software un estado lamentable.
Iniciar un programa, por ejemplo, es un reto de estabilidad emocional hasta para un monje budista. Me da lástima decirles: "Tu computadora no sirve más". En algunos casos, se sienten ofendidos, en otros piensan inmediatamente en "¿Cuánto me sale una nueva?" con mucha angustia en sus rostros.
Cuando jugamos un simple juego de cartas, sabemos las reglas de juego, aunque en ese caso hay una porción de azar, cuando adquirimos un dispositivo nuevo debemos aceptar las reglas de juego de este juego de la tecnología.
Aceptemos desde el momento que pasamos nuestra tarjeta de crédito que hay una regla, una ley, es más está programada su obsolescencia. Si señor, lamento ser tan cruel y directo: su dispositivo morirá antes o después (El "antes" depende del cuidado que Ud. tenga con él). Los sistemas operativos (Por ej: Windows XP, luego Windows Vista, luego Windows 7, 8, 10) avanzan, las aplicaciones y programas se adaptan a los nuevos sistemas operativos, los sistemas operativos necesitan más recursos (memoria ram, memoria rom, video, etc, etc)
Cuando tengas tiempo, te recomiendo leer el artículo del portal del Ministerio de Educación de la Nación: "Hablamos de... obsolescencia programada"
